Descripción
Unidad
Su sabor es algo cítrico, entre ácido y dulce a la vez, y su consistencia similar a la de un durazno. La mejor forma de comerlo es crudo y bien maduro (cuando esté algo blando al tacto y su piel se torne color naranja rojizo). También se utiliza su pulpa en deliciosos postres. Para aprovechar al máximo su sabor, recomendamos dejar madurar a temperatura ambiente Si prefiere consumirlo frío, guardar en la heladera sólo un par de horas antes.